La Posturología fue definida por Phillipe Villeneuve como la ciencia que estudia la regulación postural.
Esta ciencia nace como consecuencia del afán del hombre por conocer sus mecanismos posturales en un intento de dar respuestas a la causa de los fenómenos patológicos a nivel neuromuscular, propioceptivo y tónico-postural.
Objetivos de la posturología.
Se centra en las vías de entrada sensorial, las investiga en un intento de explicar el origen del dolor, de las alteraciones vestibulares y propioceptivas y, finalmente busca reprogramar las entradas de información y la integración sensorial. Nace pues, para aliviar el sufrimiento.
Análisis postural.
La adquisición de una postura concreta es un proceso sumamente complejo que implica:
- Consciencia postural
- Situación espacial
- Maduración psicosomática
- Información miofascial
- Información oculo-vestibular
- Información podal, exteroceptiva y propioceptiva.
- Información del sistema estomatognático y buco-linguo-faríngeo.
- Información somática y visceral.
- Regulación límbica, hipotalámica, talámica y reticular.
- Respuestas retroalimentadas
- Respuestas anticipativas.
Los diferentes trabajos realizados durante muchos años nos llevan a considerar el sistema postural como un “todo estructurado”, con múltiples entradas de información y con muchas funciones complementarias:
- Luchar contra la gravedad y mantener la postura erecta.
- Oponerse a fuerzas externas.
- Situarnos en el espacio-tiempo.
- Guiar y reforzar el movimiento.
- Equilibrarnos durante el mismo.
Principales captores posturales.
La postura está controlada a través del sistema nervioso central por captores posturales:
- Captor visual
- Captor estomatognático (articulación temporomandibular y oclusión)
- Oído interno
- Captor podal
- Fascias
Estos captores informan a los centros laberínticos que regulan el equilibrio antero-posterior y lateral. Por lo tanto, si uno de estos captores falla, nos va a proporcionar una información postural incorrecta que puede ser el origen del dolor. En este caso, será necesario tratar la vía de entrada sensorial afectada con mayor urgencia que la zona dolorosa, ya que solamente tratando la causa del problema podemos eliminar la consecuencia de forma permanente.
Por este motivo, adquiere una gran importancia el trabajo multidisciplinar donde fisioterapeutas, osteópatas, odontólogos, podólogos, optometristas, etc. deben trabajar en equipo con el objetivo de solucionar el problema del paciente. Ya que si el posturólogo encuentra una interferencia postural en el sistema estomatognático, bien sea a nivel oclusal o por un problema en la articulación temporomandibular, deberá derivar al paciente a un odontólogo que pueda corregir el problema. De igual forma ocurrirá si encontramos un problema en el pie, ojo, etc.
¿Qué trata la posturología?
La posturología no trata la patología, sino la causa del problema. De esta forma, la posturología trata de intervenir en los procesos neurosensitivos interrelacionados con el sistema postural fino desencadenantes de una serie de síntomas entre los que podemos encontrar:
- Dolores musculo-esqueléticos: especialmente en la cronificación de los mismos, lumbalgias, dolores escapulotorácicos, cervicalgias, artrosis, trastornos mandibulares, etc.
- Disfunciones neuro-vestibulo-vasculares, migrañas, vértigos, acúfenos, insomnio, etc.
- Disfunciones radiculares, ciatalgias, neuralgias cervicobraquiales, neuralgia del trigémino, etc.
- Simpaticotonías y vagotonías, estrés, ansiedad, cansancio, astenia, etc.
- Trastornos neurovegetativos: alteraciones digestivas, taquicardias, hipertensión, trastornos respiratorios, etc.
- Trastornos neurocomportamentales, depresión, ansiedad, déficit de atención, etc.
- Trastornos neurológico: parkinson, accidentes vasculares, etc.
- Infantil: trastornos del comportamiento, transtorno de la atención (TDA), hiperactividad, insomnio, ansiedad infantil, dislexia, dolores en el crecimiento, alteraciones de apoyo plantar, escoliosis, ciertos trastornos visuales, etc.
- Prevención en general de cualquier sintomatología originada por un desarreglo postural.
LA IMPORTANCIA DEL TRATAMIENTO INTERDISCIPLINAR 